martes, 1 de febrero de 2011

Rabia.

Rabia. Siento rabia al saber que estás repitiendo la misma historia con una chica nueva. Rabia al no poder expresarme como quiero. Rabia e impotencia por no poder hacer nada para abrirle los ojos a ella. Rabia al saber que te ha importado tan poco perderme, por no decir nada. Rabia. Mucha rabia. Demasiada rabia. No debería importarme tu vida, lo que haces o dejas de hacer. En parte, yo elegí que nuestros caminos se separaran, pero siento rabia al descubrir que otra te acompaña. Rabia. Yo te guiaba, yo te indicaba el sendero, yo te enseñaba a caminar poco a poco, yo, sin tropezar, con los ojos bien abiertos. Y ahora rabia, de nuestra historia sólo queda rabia. Rabia porque no te puedo olvidar. Rabia porque tú no me recuerdas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario